La experiencia en el Hotel Playa de las Llanas fue realmente estupenda. Destacaría sobre todo el servicio camareros, recepcionistas, cocineros, son todos encantadores y muy familiares. Es un hotel pequeño y con un ambiente familiar muy muy agradable. La localización del Hotel es de 10, un sitio tranquilo, de carácter rural para relajarse, con una belleza indescriptible de bosques y playas al alcance de la mano. Nos hubiera gustado, eso sí, una habitación un poco más grande. Por lo demás, encantados con la experiencia.