LLevamos años viajando con Expedia y todos los hoteles responden a las fotos publicitadas, pero en éste último no ha sido así, Indicamos habitación con dos camas y nos asignaron una con cama de matrimonio en una buardilla con un calor sofocante y un ventilador. No hay aire acondiconado por lo que ir en verano es una autentica locura. Nos prometieron habitacion con dos camas para el día siguiente y nuestra sorpresa fue que nos pusieron un sofá cama con todos los muelles fuera con lo cual imposible dormir. NUNCA limpiaron la habitación, El baño oscuro con un agua de ducha imposible graduar. El buffete-desayuno con un personal poco agradable y la comida pasada: pan duro, cereales blandos, zumos hechos con polvo, fruta sólo manzana y oxidada. Y el desayuno hay que realizarlo fuera del hotel, saliendo por una especie de garaje.
El único punto es que estaba bien comunicado, recepcionistas agradables, pero no es posible recomendar un hotel tercermundista y con un ruido insoportable. Volveremos a Praga porque es una ciudad preciosa, pero no a este hotel donde la solución final fue echar culpas al patner. Pagamos una habitación que no se corresponde con la fotografia y disfrutamos de otra bastante distinta.