Reservamos la suite con bañera jacuzzi. La bañera fue lo Ășnico bueno de la estancia. La habitaciĂłn era muy grande pero no funcionaban los aires acondicionados, asĂ que pasamos mucha calor. Estuvimos en un hotel fantasma, ya que la recepciĂłn se encuentra en el edificio de al lado, que es el restaurante donde desayunas y comes. Salvo Teresa, todo el resto del personal deja bastante que desear... malas formas de contestar, haciendo lo que les da la gana, malas caras... en fin, que no vamos a volver nunca. Si tuvieran dos dedos de frente renovarĂan persona y avivarĂan el hotel para que no parezca que estĂĄ muerto.
Hotel prĂĄctico si te pilla de camino. Las habitaciones estĂĄn bien y son limpias. No tenĂan nĂłrdico pero hay calefacciĂłn. Las llaves hay que ir a buscarlas en el bar.
El sitio estĂĄ bien para ser un hotel de carretera, limpito y normal. Se come muy bien en el restaurante que hay al lado, pues ademas la cocina es a la brasa y los platos muy abundantes para ser de menu.