Es un hotel cómodo, limpio el personal es muy amable, hay desayuno un poquito variado, se agradece mucho el café 24 horas, y el maíz y gallegas de cortesía cuando llegas en la noche, rente carro y está como a 30 minutos de Washington, cuando no es hora pico, encuentras personas que hablan español para nosotros muy bueno.